Estoy de vuelta en este blog
amado y abandonado. Después de tener mucho tiempo libre el día de hoy,
leer biografías, visitar páginas de instrumento musicales, lidiar con un leve dolor de cabeza y un muy molesto
resfriado, he reflexionado algunos temas referentes a mi vida actual (la cual
me desagrada bastante) y he llegado a las siguientes conclusiones:
1.- Estoy en una zona de confort de la cual debo salir lo
más pronto posible.
2.- Leo acerca de artistas, músicos, escritores y un largo
etcétera, y veo que tienen algo en común: han hecho lo que les gusta y
apasiona. A mí no me gusta ni me apasiona lo que hago.
3.- Éste punto está relacionado con el anterior: no estoy
involucrado con lo que estudié, no me puede importar menos, lo que nos lleva al
siguiente punto.
4.- Tengo que hacer algo que me guste.
5.- El tener un título universitario no significa nada.
6.- Esperar a que llegue “el momento adecuado” es una
idiotez. Siempre es el momento adecuado.
¿Por qué hago esta lista? Porque tengo ya casi 1 año
quejándome de mi trabajo, como una nena idiota, esperándome (no sé para qué),
disque ahorrando, disque buscando otro trabajo (lo cual es imposible si el
tiempo se va en jornadas de 12 a 14 horas, 1 hora y media de traslado, menos 1
hora de desayuno/cena, menos 30 minutos de imprevistos, menos media hora de
aseo personal), disque haciendo experiencia en algo que no me gusta para llenar
un currículum que verán payasos cuadrados del departamento de recursos humanos
de empresas que nunca pisaré.
“Pero es que tienes un buen trabajo”, dicen unos. “Pero es
que la situación está muy difícil”, dicen otros. “Váyanse a la mierda”, les
digo yo.
Lo mejor que me ha pasado en estos 2 a 3 últimos años ha
sido andar con mi novia, y ando con ella gracias a una actividad que muchos
señalan como algo sin futuro: tocar en una banda de rock. Obtuve algo bueno al hacer
algo que me gustaba.
Así llegamos a una conclusión: importa un carajo lo que
digan los demás, lo que importa es lo que tú hagas y pienses.
Besos mil :B
